Reciclar me da por culo, lo confieso. Igual que me da por culo la bipolaridad en las opiniones. O negro o blanco. O estás conmigo o contra mí. O reciclas o es que eres un terrorista que quiere destruir el planeta.

Lo primero es que el planeta ya está bastante jodido como para que ahora vengan a echarnos la culpa a nosotros, al hombre de a pie, ese individuo que tiene que vivir en un piso de 30m² con cuatro cubos de basura porque debe reciclar. No me da la gana.

De vez en cuando se oyen campanas de que las empresas encargadas del reciclaje se están forrando a costa de los ayuntamientos. Que debido al monopolio que tienen montado, o pasan por el aro y les dan todo bien ordenado y separado, o se comen su basura. No creo que a ningún alcalde le haga muy feliz la idea de tener las calles de su municipio llenas de mierda.

De lo último que me he enterado es que los vecinos de Canet de Mar ya no tienen que hacer el recorrido casa-contenedor. Unos amables funcionarios pican cada noche a sus puertas para recoger sus residuos a cambio de dejar que inspeccionen su contenido para comprobar si cumplen con la separación de residuos.

No sé muy bien cómo funciona el tema (habrán instaurado algún sistema por puntos o alguna mierda similar), pero el caso es que si te despistas y pones el tetrabrick de leche donde no toca, multa al canto.

Los vecinos de Canet ya no pagan solamente por el envase reciclable al comprar un yogur o al ayuntamiento por el servicio de recogida de basuras, ahora pagarán una tercera vez si la cagan reciclando, dejando de lado el dilema moral que provoca el que rebusquen en tu basura, en tus facturas… alguien dijo que se puede saber mucho a cerca de una persona a través de su basura.

Así que ya sabéis, cuidado al reciclar...los cubos de basura tienen ojos.

Etiquetas: opinión

Entrada publicada por swedishgirls, el 19 de diciembre de 2006. Deja un puto comentario coño!.